miércoles, 28 de noviembre de 2007

CUENTO 9: EL PAÍS DE LOS MUÑECOS DE NIEVE

PRESENTACIÓN


-Abuela, ¿por qué se dice “tienes más cuento que Calleja”?

-Porque Calleja era el apellido de un hombre que, hace muchos años, publicó muchísimos cuentos.
Por esto a los que escriben muchos cuentos se les suele decir que tienen más cuento que Calleja.

-Pero si yo no he escrito ningún cuento ¿por qué la “señorita” me dijo que tenía más cuento que ese señor que se llamaba Calleja?

-Mira. Ese señor, que se llamaba Saturnino y se apellidaba Calleja, publicó y ayudó a publicar miles de cuentos llenos de imaginación y fantasía. De ahí viene también que, cuando una persona o un niño dice o cuenta cosas con mucha imaginación y fantasía, se le suele decir que tiene más cuento que Calleja. Que es lo mismo que decir “tienes más imaginación que Calleja”, “te inventas más cosas que Calleja” o “tienes más fantasía que Calleja”.
Porque tú sabes muy bien que los cuentos que tú me cuentas y a ti te cuenta la abuela son de mucha imaginación y fantasía.

-Entonces, los cuentos que tú me cuentas que comienzan por eso y otros que tu escribiste cuando eras pequeña, ¿son como los cuentos de ese señor llamado Saturnino Calleja?

-Pues sí. Aunque no son tan importantes como los cuentos de Calleja.

-Bueno, pero son tantos los cuentos que me cuentas y están llenos de tanta imaginación y fantasía que para mí valen más que los de ese señor llamado Calleja.

Y, ahora, cuéntame otro cuento, inventado por tí y que comience por eso.
Que para mí serán siempre los cuentos de la abuela



Había una vez, hace muchísimos años, comenzó la abuela el cuento, un país muy frío, muy frío.
Era tan frío que solamente podían vivir muñecos de nieve.
Los carniceros, los panaderos, los conductores, los fruteros y los que recogían la basura y repartían las cartas eran muñecos de nieve.
Los abuelos, las abuelas, los padres, las madres, los niños y las niñas eran también muñecos de nieve.
El que más mandaba en ese país, era también un muñeco de nieve.
El sol nunca aparecía.
Sus rayos permanecían ocultos entre las nubes.
Eran muy peligrosos, para los muñecos de nieve, porque les haría desaparecer.
Todo el país había hecho un pacto con las nubes.
Éstas, seguirían siempre el movimiento del sol, para que estuviera continuamente tapado.
En el país de los muñecos de nieve, nadie conocía el sol, ni la sombra, ni las flores, ni los colores.
Sus casas, sus calles, sus campos y todo su paisaje era blanco y los habitantes también vestían de blanco.
No existía la primavera, ni el verano, ni el otoño.
En el país de la muñecos siempre era invierno.
Pero todos eran felices.
Los niños jugaban y se entretenían en medio del campo blanco y los mayores paseaban y disfrutaban alegres, mirando cómo se divertían haciendo bolas de nieve.

Un día un grupo de pequeños muñecos, cansados de estar viendo siempre lo mismo, quisieron salir del país a ver lo que había en otros países.

Les habían contado que, no muy lejos de allí, había un país en el que todo era diferente.
Animados por la curiosidad de lo que habían oído, decidieron ver lo que había más allá.

Caminaron toda la noche y al amanecer llegaron al país vecino.
Cuando comenzó a salir el sol, la luz resplandeció y los muñecos de nieve quedaron admirados de tanta belleza.
-¡Qué bonito!, se dijeron unos a otros, al contemplar tanta variedad de colores.

Los tres muñecos se habían asomado a un país distinto.
El sol, resplandeciente, salía cada día y las nubes no le tapaban.
Los tejados de las casas eran de teja roja y por el valle, rodeado de montañas, corría un río que nunca se helaba.
Las montañas estaban cubiertas de árboles verdes y el campo estaba todo lleno de colores.
Los pájaros revoloteaban y el arco iris lucía sus bellos colores entre nubes y gotas de agua.
Entretenidos con la belleza que estaban viendo, los tres muñecos, no se daba cuenta que ya llevaban un rato muy largo y los rayos del sol calentaban cada vez más.
Uno de los muñecos de nieve, comenzó a sentir un gran sudor en su cuerpo.
Por su frente escurrían pequeñas gotas y sus piernas habían hecho un charco de agua.
-¡Mirad! Estamos derritiéndonos y al sol no le tapa ninguna nube.

-¿Qué hacemos?, preguntó el más pequeño de los muñecos.

-¡Salgamos! No podemos seguir aquí.

Durante mucho tiempo corrieron por el país de los colores.
Estaban ya cansados y decidieron parar un poco, pero su cuerpo se derretía cada vez más.
No podían descansar.
De nuevo caminaron hasta que, a lo lejos, vieron el color blanco de la nieve.

El peligro había terminado.
Por fin estaban de nuevo en su país.
El frío volvió a cubrir las heridas del deshielo y pronto su cuerpo volvió a tener la misma forma de antes.
A la mañana siguiente los tres muñecos volvieron a verse y, juntos, se dijeron unos a otros.

-Nuestro país es el mejor. Aquí podemos vivir tranquilos sin que nos derrita el sol.
Nunca saldremos de aquí.
Los tres amigos se dieron un fuerte abrazo mientras gritaban llenos de alegría:
¡Nunca saldremos de aquí!
!Nunca saldremos de aquí!
Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Está precioso este cuento de los muñecos de nieve y además debemos saber donde debemos estar y ser.

Gracias por estos momentos de lectura tan bonitos Jose Luis.
MARGARITA

Anónimo dijo...

Si lo que querían hacer los muñecos de nieve era"pedir peras al olmo" con razón "nunca saldremos de aquí".
En fin que el cuento me ha gustado. Cortito, cortito que así se lee mejor.
Si publicas más, lo repetiré si no !Felices navidades"

Anónimo dijo...

Un cuento con mucha imaginación y sobre todo con gracia.

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho el cuento de los tres abetos, por lo bonito y por la época en la que estamos.
También me ha gustado el de los muñecos de nieve, por la imaginación y el invento de ese pais.
Todo muy bonito
Te recuerdo mucho

Anónimo dijo...

el pais de los muñecos tan bonito como el anterior y el anterior y el anterior y todos.
Jose Luis sigo estudiando.

Anónimo dijo...

¿Quien tiene más cuento que Calleja? Yo creo que eres tú. Sigue escribiendo que llegarás a tener tanto como Saturnino Calleja.
Soy anónimo pero amigo.

Anónimo dijo...

Siempre hay "Callejas" que les gusta escribir y "Callejas" a los que nos gusta leerlos.
Uno de esos soy yo.
Me ha gustado el pais de la muñecos.

Anónimo dijo...

Y colorín colorado el cuento de los muñecos de nieve me ha gustado.

Anónimo dijo...

Sigue escribiendo que yo seguiré leyendo. cada uno de los que leo me gusta mucho. !Qué bien los decoras!.
Si no cuelgas más este mes felices navidades.
Me recuerdas?
Alumna de la ESO

Anónimo dijo...

A ver si arreglas lo de elegir una identidad. tengo que terminar dando el ANÓNIMO, porque si doy en Alias no se publica, aunque doy bien el PUBLICAR MOMENTARIO.
Antes salían otros circulitos más claro.
No quiero que me aparezca anónimo. Soy Roberto el que escribe por la hermana.
Nos ha gustado mucho el pais de los muñecos y a mi hermana más que a mí
Roberto

Anónimo dijo...

Roberto, he leido tu comentario,sobre la dificultad que tienes para que salga tu nombre. Es verdad que han cambiado cosas pero ahora no hay problema. Fijate:
1º.-Escribes el comentario en el rectángulo grande,como siempre
2º.-Señalas con un "Clic" en el circulito donde pone Alias y a continuación escribes tu nombre.
3º.- Si quieres que sea anónimo señalas con un "Clic" en el circulido de anónimo.
4º.- Finalmente das en PUBLICAR COMENTARIO y ya está. Verás que ha salido tu comentario al lado de los otros comentarios de la izquierda.

Anónimo dijo...

a mi tambie me gusta la nieve Jose Luis

Anónimo dijo...

Hola soy tu alumno Alejandro Bermejo
me gusta que siempre pongas el detalle de que la clase salga.Gracias por poner esos cuentos dedicados a la clase de quinto del Enrique Tierno Galbán esperamos que vengas ha ver nuestra obra es el día 21 de este mes todos querían que hoy la hubieras visto bueno voy a estudiar adios espero que leas esta carta

Anónimo dijo...

Me gusta mucho el diálogo del nieto con la abuela. Es curioso siempre te inventas algo nuevo
Me gustan tambien mucho las fotos.

Anónimo dijo...

Hola Jose Luis espero que vengas a ver nuestra obra de teatro de navidad el último día de clase espero que te guste. VEN

Anónimo dijo...

He leído los comentarios de: Alvaro,
Alejandro Bermejo,
Laura Iglesias,
Teresa,
Laura Martínez y
Claudia.
Está muy bien todo lo que me decís, aunque lo del día 21 lo veo un poco difícil.
Pienso que esté o no lo haréis muy bien.
Muchas gracias por vuestro mensaje

Anónimo dijo...

Me ha gustado el cuento de los muñecos de nieve, aunque me da pena que los pobres no puedan conocer mundo porque se derriten.

Anónimo dijo...

Hola Marcos:
He leído tu último comentario.
Gracias por tu buena opinión sobre el cuento.
Lo siento mucho por los pobres muñecos. Pero su país era el de la Nieve.
Entra en INTERNET y escribes "Dédalo e Ícaro". Verás lo que le pasó a Ícaro por hacer lo que no tenía que hacer.
Muchas gracia por tu comentario